Liberarse del destino familiar de Elisabeth Horowitz

Es un libro de psicogenealogía que cogí por fuerzas mayores en la biblioteca uno de los días más significativos de esta etapa tan difícil que he pasado.

A ver, en principio el trabajo es realmente bueno, he dicho en el tiempo en que lo leía tropecientas veces lo que me ha ayudado y lo que he aprendido, y realmente ha sido el libro más guía que he tenido en mis manos aparte de los canónicos. Entonces, el libro en sí no es que tenga gran valor, pero si la información, que no quiero que se confunda con la típica de autoayuda, de esos que dicen 'obtén autoestima mediante el trabajo en equipo' o 'ser feliz es cuestión de proponerselo' o cosas por el estilo, sólo comparables a la publicidad del canal EHS, de venta por teléfono.

Está escrito en forma de entrevista y es ameno y light, además los capítulos son concisos y se pueden saltar tranquilamente, aunque yo he preferido enterarme de todo absolutamente.

Trata de cómo liberarse de los jándicas que nos propician nuestro árbol genealógico y nuestra historia natal, que incluye concepción, etapa oral, anal e infancia y pubertad.

Lo realmente bueno del libro y peligroso de quien no conozca nada respecto a este tema es que esos jándicas son realmente condicionantes y se encuentra en casi todas las familias, y las que no los tienen, es precisamente porque lo han sabido combatir con la consciencia y el equilibrio. Todas las cosas pueden influirnos si no somos nosotros mismos, y eso es más bien lo que debe estudiar la sociología, al ser humano en su estado de sujeto, y no al ser humano como ser auténtico, eso lo tengo ahora claro, pero porque he llegado al estado del 'Ello' y no del 'Yo'. No es suficiente deambular entre tesis, historias y excusas, lo verdaderamente acertado es saber cómo hacerlo y encontrar la causalidad de todo para poder cambiarlo, pero a conciencia, ya lo he dicho antes.

Aunque ahora estoy haciendole la entrada al libro y no incluiré los conceptos, ya digo por adelantado que iré informando de todo lo que he aprendido. La terapia genealógica tiene todo su sentido cuando se trata de problemas en las relaciones, en la sociabilidad, la economía y los miedos, facilmente mezclables y confundibles con los deseos y viceversa.

Es un documento del que tomar apuntes pero de esos que se guardan en una carpeta y se dejan a mano. Vamos, que es indispensable y además contiene el contenido idóneo para una emisión de Cuarto Milenio.

Lo recomiendo, eso ante todo, porque me ha abierto la mente y es por eso que ahora estoy tan feliz y libre de todo.